La Madre Universal, Anandamayi Ma
HOMENAJE A LA MADRE UNIVERSAL
Sin dudarlo el arquetipo de la madre, es el que conlleva una visión más amplia del amor y del afecto por el prójimo.
Desde hace unos años, podemos apreciar la creciente mirada de las madres de hoy en día, hacia la búsqueda de un mayor equilibrio interno para poder transmitirlo a sus hijos.
Ellas siempre han podido con todo… pero ahora, en este era moderna, el reto es evidente, la integración del cuidado familiar con una enorme implicación en la vida laboral.
CONSCIENCIA MODERNA
Las mujeres que actualmente han decidido ser madres se ven envueltas en el caos triple de esta vida: familia-trabajo-equilibrio personal.
Muchas de ellas están realmente interesadas en lograr esta integración a través del descubrimiento de un camino de paz y espiritualidad genuina. Es cierto y verdad que encontrar una referente para este tipo de camino no es sencillo, pues no es fácil encontrar literatura sobre mujeres de sabiduría o de verdaderas maestras de la vida y sus enseñanzas.
UNA REFERENTE DE LAS BUENAS
Si llevamos el rol de la madre al plano más universal y de sabiduría nos dirigimos al encuentro de las verdaderas maestras de lo desconocido. Entre estas mujeres o madres universales, hoy queremos destacar contigo una en especial.
Ella es una de las mujeres más grandes de la India. Sola y con su propia fuerza espiritual se convirtió en cuestión de poco tiempo en la santa más venerada del siglo XX.
SRI MA ANADAMAYI
Nació con el nombre de Nirmala Sundari Devi el 30 de abril de 1896. Ella junto a su familia vivían en la pobreza, pero con un espíritu altamente espiritual. Asistió a la escuela durante un tiempo breve donde otorgo satisfacción a sus profesores por su buen aprendizaje. Su madre solía preocuparse por ella, ya que pensaba que tenía un desarrollo mental pobre debido a su continua despreocupación y felicidad.
Ella era una persona sin apenas estudios, pero llena de sabiduría interior.
Anandamayi Ma consiguió otorgar un gran beneficio a toda la población india y hoy todavía sigue llegándonos su abrazo maternal, incluso hasta occidente.
Era la encarnación de una gozosa autosuficiencia que capturaba los corazones de todos los que se le acercaban. Tenía una personalidad misteriosa y reservada que escapaba al entendimiento humano y, sin embargo, estaba tan atemperada por su amor compasivo hacia todas las criaturas vivas que le hacía parecer más cercana de lo que el amigo más complaciente pudiera estar.
Se convirtió en la guía y maestra de miles de personas de todos los lugares. Ella sola con su confianza y fuerza interna nos logró cautivar. Y poco a poco fue convirtiéndose en un referente del amor, la compasión y la sabiduría.
Una frase muy inspiradora que ella solía usar desde bien joven: "Vani. Jo ho jaye" (lo que tenga que ocurrir déjalo estar).
PRIMEROS INDICIOS DE SU PODER INTERNO
Volvamos a un acontecimiento donde empezó a demostrar que ella tenía dentro un inmenso poder.
Sri Ma se sentaba en el suelo en una esquina de su habitación y verbalmente empezaba a repetir la palabra ‘Hari Hari Hari’ (una de las formas de Dios según los hinduistas). Entonces su marido la veía absorberse progresivamente en un mundo de gozo interior. Tras varios días en esta rutina, él la veía asumir algunas posturas yóguicas o asanas. La primera de estas fue probablemente la de siddhasana (asana tradicional del hatha yoga). Él, por supuesto, sabía que ella no tenía conocimientos previos de Yoga o asanas yóguicos, sino que le sobrevenían.
Cuando ella recitaba sílabas en sánscrito: las sílabas eran como la resonancia que salía de un penetrante ritmo. Su cuerpo estaba sintonizado con el ritmo universal de aquella fuerza que subyace a todo lo que existe y se convirtió en una especia de instrumento con el que tocar esta música cósmica.
Parecía fusionarse con el sonido de las letras que pronunciaba; sus miembros, su cuerpo entero se movía rítmicamente como si se tratase de vibrantes formas de danza de extraordinaria coreografía dirigidas por un poder interior. En tales ocasiones su cuerpo emanaba un resplandor perceptible a los ojos de los espectadores.
Su marido la contemplaba cautivado, sin dudar de la autenticidad de sus manifestaciones; incluso era capaz de dejar de lado los comentarios adversos de algunos de los vecinos que no lograban entender que estaban presenciando el despliegue de la personalidad magnética de Sri Ma, que poseía el kheyala para revelarse a sí misma en el papel de una sadhaka (aspirante o iniciado en las tradiciones budistas, hindúes…)
Este y muchos otros relatos sobre sus experiencias de despertar espiritual eran comunes en su vida y fueron el reflejo o la inspiración de infinitas personas. Calo hondo en muchas mujeres que buscaban ese cambio espiritual en sus vidas y fue fuente de la aspiración de ellas.
Esperamos que estos breves relatos sobre su vida te inspiren y puedas compartir esto con tus seres más cercanos. Aprovecha la sabiduría de Sri Anandamayi Ma y convierte en alguien que procura su felicidad y la de los demás.